Tal vez para muchos los recuerdos del colegio sean los mejores, tus amigos son amigos y no una futura competencia; la vida era “más simple”. Sin embargo, hoy por hoy observamos un fenómeno que marca de manera terrible a los niños y jóvenes: El bullying.
Muchas de las agresiones, tanto físicas como psicológicas, son sistemáticas. El acoso no es solo en las horas de los descansos; se extiende a las horas de clase e incluso fuera de las aulas (usando mensajes de texto y Facebook). Los resultados son chicos que han sido agredidos de gravedad, algunos que han terminado por suicidarse, y en otros casos se considera como origen de acciones más violentas y con armas de fuego dentro de las escuelas.
Chats, SMS, Facebook se están usando para escapar de la vigilancia de los adultos cuando se quiere agredir.
¿Cosas de chicos?
Mucha de bibliografía sobre el tema viene de Estados Unidos donde se ha convertido en un mal endémico de sus escuelas. En internet se observa información sobre los síntomas de las victimas, para lo cual recomiendo el artículo de Eduquemos en la Red, así como el de Susana Frisancho que hace hincapié en la ausencia de los adultos en detectar a los acosadores; muchas veces pensando que todo se trata de “cosas de chicos” lo cual en el fondo puede estar encubriendo su propia incapacidad para el manejo de estas situaciones.
Dentro de las causas se habla de la desintegración familiar, los malos ejemplos de casa, la repetición de conductas aprendidas (un niño acosado se convierte en un acosador cuando es más grande), los juegos cada vez más violentos (especialmente los videojuegos), una programación televisiva más violenta (personajes icónicos, el tipo de humor, lo que se ofrece en los noticieros). Causas más, causas menos, lo cierto es que muchos padres de familia esperan que en la escuela se resuelva todo; total “para eso pago una cantidad de dinero cada mes”. Sin considerar que por más que los profesores intenten corregir conductas en los acosadores y acosados, es poco si no hay un seguimiento en casa. Así mismo, también tenemos a profesores que solo buscan dictar sus horas, ir a otro colegio y seguir una rutina pues los sueldos no alcanzan. Son pocos los que realmente buscan ser maestros y enseñar valores y modelos de comportamiento a los niño/as.
Sin la supervisión en casa, poco se puede hacer para cambiar las conductas de acosadores y acosados.
No es solo cosa de “gringos”
Pensar que en nuestro país no se da el bullying es una ilusión. Hay un trabajo importantísimo sobre la violencia en los colegios estatales en primaria (el tema de los ataques es una señal clara de alerta). Así mismo, los diversos casos de ataques en escuelas hicieron noticia y pusieron el tema en el ojo público, y que el congreso aprobase la Ley Antibulliyng (cuya debilidad es el número de psicólogos en las escuelas) evidencian que el tema es importante en la agenda educativa. Sin embargo, ¿comunicativamente como afrontar el problema?
Clinton Mallye, uno de los casos más fuertes de bullying en Perú.
No vamos a descubrir el camino, pero sí plantear pautas que podrían llevarse a cabo y que ya han tratado algunos países:
No quedarse callado o justificarlo: Profesores y alumnos están llamados a “hacer oír su voz”, especialmente por aquellos que no pueden lograr que los escuchen como lo muestra un spot desarrollado en Canadá.
Informar sobre la situación: Muchas personas no identifican las situaciones (piensan que son solo juegos), ni los actores (victimas y acosadores), ni sus mortales consecuencias. Ojo es importante empezar por ello e incluir el cyber bullying muy común en escuelas privadas.
Muchas "cosas de chico/as" en realidad esconden situaciones de acoso.
No quedarse callado o justificarlo: Profesores y alumnos están llamados a “hacer oír su voz”, especialmente por aquellos que no pueden lograr que los escuchen como lo muestra un spot desarrollado en Canadá.
Alumnos, maestros y padres deben estar pendientes para detener estas conductas.
Usar a líderes de opinión: Los líderes suelen ser ejemplos a seguir, por imitación, porque son muy seguros, etc. Cuando un líder defiende a una persona puede que ésta deje de ser acosada (ver spot).
Es muy curioso como muchas estrellas revelan que en su etapa escolar sufrieron de este problema; lo cual brinda una oportunidad cuando se pide su colaboración para ser voceros. Un par de ejemplos son las campañas desarrolladas por las cantantes Jojo y Demi Lovato.
Demi Lovato presta su imagen para una campaña contra el bullying, al haberlo sufrido en la escuela.
Así mismo los medios de comunicación deberían tomar la posta en ello, en parte son responsables de la estandarización de los contenidos más allá de decir que solo “ponen lo que el público quiere”. Cadenas como MTV (A thin line) y Cartoon Network han trabajado spots al respecto.
Combatir las causas: Las personas, especialmente niños y adolescentes, imitan conductas; y éstas pueden ser el origen de algunos ataques ("lo ataco porque el grupo lo hace" o "porque he visto a chicos/as más grandes hacerlo" o "porque he visto que los adultos lo hacen"). Si cambiamos nuestras conductas, los más pequeños no tendrán un "mal modelo que imitar". (ver spot).
Ninguna campaña será efectiva en el corto o mediano plazo. Tampoco lo será sin el apoyo de los diversos estamentos involucrados (especialmente maestros y padres), sin el desarrollo de políticas claras y castigos para los responsables, y sin el compromiso de los medios de comunicación, así como que éstos brinden los espacios necesarios para tratar el tema de manera constante.